Cuando sabes que estás embarazada, lo normal es comenzar a hacer planes acerca de todo lo que implica la llegada del bebé, por lo que de inmediato empiezas a prepararte mental y físicamente. Dentro de esta preparación, un aspecto sumamente importante es la alimentación durante el embarazo.
Seguramente todos querrán darte comida al por mayor porque, como dicen, “ahora tienes que comer por dos” algo que no es del todo cierto. Mas que la cantidad, la calidad de los alimentos en el embarazo debe ser la adecuada, es muy importante que las calorías que ingieres provengan de alimentos nutritivos (que aproximadamente deben ser unas 300 calorías adicionales a lo que consumías normalmente y NO más) por lo que comer demasiados carbohidratos, golosinas o alimentos chatarra no sería una opción si no quieres terminar con muchos kilos de sobrepeso.
Piénsalo así: tu bebé se forma de los nutrientes de tu cuerpo, y esos nutrientes deben provenir de una buena alimentación, algo que sin duda influirá en la salud de tu bebé.
¿Qué SÍ debes comer?
Agua. Mantenerte hidratada es algo que te beneficiará por dentro pero también por fuera ayudando a tu piel a estar mucho más sana y resistir el estiramiento que experimentará.
Frutas y vegetales. Definitivamente debes incluirlos en tu dieta, son una importante fuente de vitaminas y nutrientes, además te ayudarán a sentirte ligera y disminuir el estreñimiento.
Cereales. Puedes incluir en tu dieta cereales que son ricos en carbohidratos y fibra, entre los mejores se encuentran el centeno, el trigo y la avena, esta última tiene muchos beneficios y va bien con un poco de leche descremada o frutas, ¡es deliciosa!
¿Qué NO debes comer?
Alimentos procesados. Evita el pan, galletas, embutidos, enlatados, las sopas instantáneas y todos aquellos alimentos procesados, ricos en azúcares y con conservadores.
Alimentos poco seguros. Leche no pasteurizada, alimentos crudos, quesos frescos y blandos, son algunos alimentos que pueden contener bacterias y no son recomendables consumirlos durante la formación del bebé.
Alcohol y estimulantes. Nada de bebidas alcohólicas ya que pueden ocasionar problemas severos en la salud de tu bebé. Los estimulantes como el café, el refresco de cola, las bebidas energéticas y algunos tés es mejor evitarlos ya que pueden tener efectos perjudiciales durante el embarazo.
¿Y los antojos?
Claro que puedes darte gusto con los antojos, pero no te excedas demasiado si son muy calóricos.
Como ves, no son grandes cambios los que tendrás que hacer, simplemente alimentarte sanamente, hacer ejercicio, acudir a las citas con tu médico y lo más importante, ¡disfrutar esta maravillosa etapa a todo lo que da!